La sangre es la vida.
Bram Stoker, Drácula.
El vampiro, John William Polidori.
Todos querían verlo, especialmente aquellos que habían estado acostumbrados a las emociones fuertes en el pasado y se veían obligados a soportar la pesadez del tedio; estos últimos se veían especialmente satisfechos al conocer a alguien capaz de atrapar su atención.
El huésped de Drácula, Bram Stoker.
Con frecuencia la nieve, los lobos y la noche encierran diversos peligros.
Drácula, Bram Stoker.
Nadie sabe lo dulce y querida que puede ser la mañana para los ojos y el corazón, hasta que soporta los tormentos de la noche.
Vampiro, Emilia Pardo Bazán.
¿Sucede todos los días que un sesentón vaya al altar con una niña de quince años?
El almohadón de plumas, Horacio Quiroga.
Su luna de miel fue un largo escalofrío.
Carmilla, Joshep Sheridan Le Fanu.
Suspiró y me miró apasionadamente con sus hermosos ojos negros. En realidad, aquella joven me atraía de un modo inexplicable, pero al propio tiempo me inspiraba una indefinible repulsión. Sin embargo, pese a lo contradictorio de mis sentimientos lo que predominaba era la atracción. Aquella joven desconocida -hasta cierto punto- me interesaba y me conquistaba. ¡Era tan hermosa y fascinante!
Entrevista con el vampiro, Anne Rice.
Crepúsculo, Stephenie Meyer.
Hay tres cosas de las que estoy segura. Primera, Edward es un vampiro. Segunda, una parte de él se muere por beber mi sangre. Y tercera, estoy total y perdidamente enamorada de él.
Déjame entrar, John Ajvide Liindqvist.
Siempre me miro en tus ojos y si en mis ojos te miras todo queda entre nosotros.
Muerto hasta el amanecer, Charlaine Harris.
Cuando el vampiro entró en el bar, yo llevaba años esperándole.
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